Fué mi primer pensamiento, pues tenía la errónea idea de que sería tan aburrido y “teto” como lo era el solo hecho de pensarlo.
Al llegar al “Telcel”. Tal y como pensé: vacío. Cerca de 50 personas en todo el aforo. Un *jaja* suena en mi mente, pues vaya: ¿Quién querría escuchar a Moderatto en vivo?.
Quizás 20, quizás 30. Y el concierto dió inicio, con varios covers, (aunque no sonaban nada mal) “¿por qué no tocan algo de ellos?”.
Me responde: Ni idea, de hecho es raro, y si solo van a ser covers, la neta nos vamos.
Los tamborazos, las guitarras al unísono; y de un momento a otro… SIIIIIIII, YA LO VEÍA VENIIIIIR.
Me cae el veinte. Ahhhh, con que si era de ellos. Y lo que era un cliché mal formada se deshizo al ver el flow que llevaban. Era inesperadamente ¡ asombroso !. Fuegos artificiales, fuego real, e incluso subió a un guitarrista del público.
